Mi viaje: Copenhague-Estocolmo

Hoy más que nunca puedo decir aquello de que lo importante no es el sitio físico al que se viaja, sino aquello que experimentas en todo el trayecto. Vuelvo con el corazón un poco más lleno: de anécdotas, de aprendizajes, de palabras, de sentimientos, de miradas, de magia, de sonrisas y de abrazos que me explotan por dentro.

Vuelvo a encontrarme a la vuelta con esa sensación de que mi sitio no está en donde permanezco, parece que sólo sé ser feliz huyendo de todo aquello que me ata, que me impone horarios y me resta oportunidades para ser libre.

Toca amoldarse, agachar la cabeza y fingir. Sin embargo, cada vez se me hace más complicado volver a disfrazar.

Tengo la suerte de que en mi vida hay pequeños botes que me salvan de esta marea que a veces me arrastra hacía las profundidas del oceáno para que mi cuerpo se hunda. Quizás, afortunadamente, ahora tengo más fuerzas para subirme a esos botes y remar, remar hasta que llega a la isla desconocida.

Me gusta tener cerca a alguien que me escucha y que me entiende, que no percibe en mis palabras una amenaza contra él sino que me apoya y me devuelve una sonrisa en esos instantes en los que me entra el miedo y a mis alas les es más difícil batir. Me gusta esa sonrisa amplia con la que me mira, a veces sin decir nada, pero contándome un montón de cosas en silencio y con la complicidad de quien me respeta y me entiende.

Este viaje a Suecia quizás no ha sido fundamental por las ciudades visitadas, los restaurantes donde hemos comido o los monumentos vistos. No. Lo esencial para mí ha surgido en otros momentos, quizás imperceptibles pero llenos de magia.

Hoy puedo decir que estoy enamorada.

30/12/08 Madrid-Copenhague

No me puedo quejar de la forma en la que ha comenzado este viaje, mucha incertidumbre, desde luego. No he pegado ojo en toda la noche, me la he pasado dudando de si podría viajar. Digamos que con los nervios, cometí un pequeño error en el billete y podría haber tenido problemas. Menos mal que al final parece que se ha solucionado todo.
En principio yo iba a viajar el día 31, ya que hoy aún tenía pacientes que tratar. Sin embargo, ayer descrubrí que al final no iba a tener ni uno de mis niños. Por eso me puse a cambiar el billete para hoy mismo, así me podía ir con Ismael y Almudena. Como me saqué el billete en un momento algo estresante pues no lo hice todo lo bien que debía.
Ayer a la noche, cuando llegué de estar con las chicas de lingüística, aprecié mi error. Intenté llamar a AENA, pero no pudieron solucionarme la duda. Por eso la noche se ma ha hecho tan larga.
Al final a las 7 de la mañana estaba preparada para ir al aeropuerto de Barajas, parecía que nadie podía decirme nada por teléfono. La única forma de solucionarlo era presentame allí y ver si me de jaban viajar. Así lo he hecho. Aunque habíamos quedado allí a las ocho y media de la mañana, yo me he adelantado. Así ellos no tenían que apechugar con mi error. Al final, lo bueno es que lo solucioné todo.
Almudena e Ismael llegaron sobre la hora prevista y facturaron sin dificultad alguna.
Luego ya nos hemos encontrado más problemas, pero ninguno por nuestra responsabilidad. Primero que si teníamos que esperar a unos pasajeros que llegaban de Málaga, luego un sensor, luego... Finalmente nos han bajado del avión y hastas las tres y media de la tarde no nos han embarcado en otro.
Menos mal que somos personas positivas y tranquilas y nos hemos tomado todo con mucha calma.
La llegada al aeropuesto de Copenhague ha sido sencilla y en nada no hemos presentado en el albergue que habíamos reservado, bueno antes hemos dado una vuelta no planeado por la calle principal de la ciudad.
La recepcionista del albergue era algo seca. Hemos dejado las mochilas y maletas y nos hemos preparado para ver la ciudad. Teniendo en cuenta lo poco que vamos a íbamos a estar por acá había que disfrutar de todos los minutos, en especial, porque mis compañeros de viaje no han estado antes.
Hemos acabado cenando malamente en un Burger y luego tomando una cerveza en un bar. Allí hemos sido testigos de como una pareja hacía un "sinpa" (poniendo como excusa que salían a fumar). La verdad es que yo ne he quedado impactada.
A la noche ya hemos regresado al albergue. Mañana nos toca madrugar, hacer algo de compra en el supermercado y coger el tren hacia Mälmo.

31/12/08 Copenhague-Mälmo

Madrugar creo que se va a convertir en una constante de nuestro viaje, es lo que tiene ir de vacaciones a conocer ciudades y no quedarse en la playita. Además tenemos que añadir el no haber visto el cartel donde ponía que la semana de vacaciones de Navidad el desayuno se prepara una hora más tarde. ¡Qué listos somos!
Bueno así hemos hecho piña y nos hemos puesto a charlar en la habitación de Almudena.
El desayuno ha estado rico o al menos a mí me ha sabido a gloria. Cuando hemos acabado hemos seguido visitando Copenhague, ya que ayer no vimos todo lo que se debe ver en esta ciudad.
Al mediodía nos hemos acercado a la estación para coger los billetes hacia Mälmo, es decir, ya hemos llegado a Suecia. Antes de subirnos al tren, hemos gastado nuestras pocas coronas danesas en un delicioso almuerzo. ¡Qué bien nos estamos alimentado!
En Mälmo tras alguna anécdota con el transporte público hemos llegado al B&B. La verdad es que me he sentido muy cómoda en esta ciudad, le gente me parece especialmente amable.
A la tarde, es decir, un poco pronto, nos ha dado por disfrutar de un poco de vino blanco que compramos en Copenhague, era nuestra forma de celebrar el cambio de año. Con las cartas la verdad que hemos pasado una buena tarde.
Luego nos fuimos a un sitio donde comentaban que había ambiente el día de Nochevieja. Quizás llegamos demasiado pronto, pero vimos poca juerga. Ahora, ningún problema, que la marcha la llevamos nosotros.
Lo cierto es que tras estar en un bar, celebrando este día a nuestro modo y cenar un sandwich que nos hicimos con nuestra provisiones a las diez y media estábamos de vuelta al B&B y... a las once durmiendo.
Esta ha sido nuestra forma de pasar Nochevieja, durmiendo y la verdad es que no me arrepiento de nada.
Una pena que al final Ismael se durmiera porque no ha podido disfrutar de sus uvas. La verdad es que estábamos tan cansados (vamos a decirlo así) que dormi en la juntura de las camas y no me enteré de los fuegos artificiales ni de las llamadas de mi familia.

01/01/09 Mälmo-Kalmar


Levantarse hoy ha sido muy divertido. En especial cuando hemos reflexionado sobre nuestra Nochevieja, nada relacionada con las de años anteriores.
Luego nos hemos preparado para coger el autobús e ir a la estación de tren. De este modo, Mälmo se ha convertido en una ciudad de transición. La idea era ir a Kalmar y así encontrar alojamiento y empezar a disfrutar de los sitios a los que vamos más relajadamente y, sobre todo , con luz.
El viaje en tren a Kalmar ha sido curioso, digamos que hemos coincidido en el tren con alguno que venía de la fiesta. En Mälmo está una de las discotecas más conocidas de Escandinavia y claro había mucha juventud en el tren.
Aproximadamente sobre las doce y media hemos llegado a Kalmar y hemos intentado localizar donde dormir. La verdad es que ha sido más complicado de lo que habíamos pensado, pero finalmente buscando por separado hemos encontrado un sitio precioso. De hecho espero volver algún día con más tiempo y en verano.
Tras situarnos en nuestra cabañita y alucinar con lo lindo que es el hotel, hemos estado paseando por este pueblecito. Tiene un castillo precioso y una parte antigua muy linda.
Después, como ya había algo de hambre, nos hemos ido a casi merendar a un chino.
Por último a relajarnos en el salón del hotel y a ver la televisión tirados en el suelo. La verdad es que no hemos hecho nada especial, pero yo he disfrutado especialmente del día de hoy.

02/01/09 Kalmar-Örebro


Levantarse pronto en este hotel maravilloso no nos ha importado. El desayuno ha sido deliciosa, con una pequeña hoguera en medio del salón de desayunos. Tras ese delicioso café, nos hemos acercado al concesionario donde alquilan los coches. ¡Por fin vamos a poder ir a nuestro aire un poco más!
A las nueves de la mañana ya teníamos un coche en nuestras manos: un toyota y, en consecuencia, empezamos a tirar millas hacia donde nos llevase el piloto, en este caso Ismael.
Nuestro primer destino Grana. Dice la guía que es una ciudad con una plaza muy linda, con unos edificios particulares. Esta ciudad además es famosa por los bastones de caramelo. Hemos pasado por alguna tienda preciosa y por una especie de supermercado donde nos hemos comprado unas papas, para cuando nos entre algo de hambre.
La siguiente parada ha sido Vadstena. Esta ciudad me ha parecido más agrable que la anterior. Después de recorrerla nos ha tocado comer (algo tarde) en una pizzería. Luegos nos hemos dado el capricho de tomar una magdalena y un café. Yo posiblemente me haya comido la magdalena más curiosa del mundo, de azafrán. La verdad es que no estaba deliciosa.
Cuando hemos llegado a Örebro, nos hemos puesto a buscar hotel. Tras mirar en unos cuantos, nos hemos decidido por el Ibis. No suelen ser habitaciones enormes, pero suelen ser asequibles.
Después nos hemos pasado por la farmacia de urgencias (cosas de mis cistitis) y no hemos conseguido arreglar nada. ¡Una pena!
Al final, a jugar a las cartas y al stop en la cafetería del hotel.

03/01/09 Örebro-Mora

¡Por fin hemos apreciado la primera nevada Sueca! ¡Qué nevada! La verdad es que ya estábamos todos moscas con el tema y mira... hoy sí que hemos tenido nieve para aburrir. El camino ha sido una aventura por la nieve, creo que Ismael incluso iba algo preocupado por el coche.
Inicialmente hemos visitado Örebro. Es una ciudad bonita, aunque tampoco te deja impactado.
Nuestra primera parada ha sido en Tallberg. Hemos visto un hotel muy lindo y allí directos que hemos ido, pero lamentablemente no había sido. Luego hemos pasado por varios hoteles más pero también estaban completos. Bueno, uno no los sabemos porque no encontramos donde nos informaran aunque yo casi que entré hasta la cocina.
El siguiente pueblo ha sido Rallwick donde había poco que ver y un hotel con sitio pero caro y feo. Lo desechamos.
Como somos muy valientes decidimos seguir nuestra ruta en dirección al norte hasta Mora, para pagar un precio desorbitado siempre hay tiempo y quizás tuviéramos más suerte.
Al llegar a Mora fue cuando entedimos que es la zona a la que los suecos van para esquiar. Vamos que estaba todo a reventar. Menos mal que una mujer se apiadó de mí y nos ofreció una habitación doble para los tres con una cama supletoria. Evidentemente aceptamos. Luego tampoco era tan pequeñas, incluso más espaciosa que la del Ibis de ayer.
Fuimos a cenar a un sitio de ensaladas, pero no me sentó al cuerpo muy bien la ensalada.
Finalmente conocimos la ciudad, helados porque empieza a hacer un frío que te quedas congeladito.
La noche ha sido de las más divertidas. Hemos decidido entretenernos jugando a las películas y yo he acabado llorando de la risa. ¡Mi niño que tiene mucho arte!

04/01/09 Mora-Estocolmo

Hoy nos hemos dado una gran vuelta por Suecia. Creo que en parte no estaba prevista, pero la verdad es que me ha resultado muy interesante.
Nos hemos levantado tempranito, como casi siempre. No podemos decir que estamos descansado en exceso en este viaje, menos mal que tampoco nos matamos a andar.
Después de desayunar, lo típico de este viaje: café y tostada. Ismael y yo hemos salido a fumar. Nos ha dado la impresión de que hacía algo más de frío que los días anteriores (¡Mira que ya hemos pasado frío!). Observando la naricilla del chiquillo, hemos estado casi seguros de que estaba haciendo mucho, mucho frío.
Luego hemos recogido las maletas y directos al coche para seguir con la aventura. Al subir al coche y ver la temperatura casi nos da un síncope, marcaba -21º. Nunca pensé yo que iba a llegar a estar a esta temperatura. La botella de agua que habíamos dejado en el coche se había congelado.
Durante todo el camino hemos seguido flipando con el marcado de la temperatura. Durante la paradita que hemos hecho para fumar, hemos estado a -28º.
El itinerario inicial ha sido Mora-Orsa-Ljusdal y Gävle. Aquí hemos decidido bajarnos. Según la guía era una ciudad con algunos rincones interesantes. La verdad es que volvimos a equivocarnos haciendo caso a la guía o nuestro gusto es bien diferente. Al menos hemos caminado por la ciudad, con el miedo de que al volver no estuviera el coche.
Desde Gävle hemos seguido el trayecto hasta Uppsala. Esta ciudad sí que nos ha parecido más interesante. Se notaba que era una ciudad universitaria, había más ambiente. Hemos aprovechado para cenar (malamente) y tomarnos un café enorme.
Ya sólo nos quedaba un pequeño camino hasta Estocolmo y lo hemos hecho muy bien. No nos ha costado casi nada llegar hasta el hostal. ¡Somos unos linces!
A pesar del cansancio de las horas en el coche, hemos decidido dar una vuelta por Estocolmo de noche para empezar a disfrutar de esta linda ciudad.

05/01/09 Estocolmo

Hoy tengo que reconocer que ha sido un día de los más cosmopolita. Nos ha tocado recorrer la parte de la ciudad vieja de Estocolmo, Gamla Stand.
Antes de ponernos manos a la obra, hemos ido a dejar el coche, porque aquí ya no lo vamos a necesitar para nada más.
Una vez hemos dejado el coche, nos hemos dirigido a nuestro destino. Primero nos ha tocado ver las típicas callejuelas turísticas y luego nos hemos dado una hora para los regalos de Navidad. Es una verdadera chorradas pero bueno ya que no celebramos Nocheviaje así celebramos algo. Ha sido un poco caótico porque como estábamos los tres en la misma zona, no hacíamos más que encontrarnos en todas las tiendas y la gracia de la idea era sorprendernos. Bueno, al final lo hemos logrado.
Después hemos hecho una parada para disfrutar de un estupendo café con unas deliciosas porciones de tarta. ¡Nos ha sentado de maravilla!
Luego hemos seguido con la visita a la ciudad hasta la hora de comer. Hoy hemos sido afortunados la comida ha sido en un sitio de menú, estaba riquísima y era económica. ¡Qué novedad!
De nuevo hemos interpretado nuestro papel de turistas hasta las 7 de la tarde que hemos regresado al hotel.
Cuando estábamos allá, se nos ha ocurrido una idea estupenda y hemos preguntado en la recepción si había alguna bolera. ¡Sorpresa! Al ladito del hotel teníamos una bolera a la cual hemos ido sin pensarlo dos veces. Encima con una música muy animada, toda de nuestra tierra.
Por la noche hemos celebrado los Reyes en un restaurante italiano. Gastronómicamente hablando hoy nos hemos lucido.
No nos queríamos acostar muy tarde porque mañana madrugamos para ir al aeropuerto.

06/01/09 Estocolmo

¡Vaya madrugón que nos hemos dado hoy para el cuerpo! Almudena tiene que coger el avión para Madrid, puesto que ella ya trabaja mañana. Por eso, hemos decidido acompañarla al aeropuerto de Arlanda. No se merece menos esta estupenda compañera de viaje que hemos tenido. La verdad es que ha sido toda una experiencia el viajar con ella.
A las cinco de la mañana han sonado los despertadores, luego viajecito en metro y en tren hasta el aeropuerto.
La verdad es que todo ha ido muy rápido porque a las siete de la mañana estábamos de nuevo en la zona del hostal para desayunar. Teniendo en cuenta que teníamos que hacer tiempo para cambiarnos de habitación, ya nos merecíamos una habitación doble, nos hemos ido a desayunar a una cafetería que tenía internet y así matábamos algo de tiempo.
Tras el desayuno, hemos vuelto para arreglar lo de la habitación, con alguna complícación por el tema de las sábanas. Luego hemos decidido descansar un poco antes de salir a dar una vuelta por la ciudad (tampoco nos queda mucho por ver). La verdad es que ya tenía ganas de compartir un rato relajado con mi compañero, lo necesitaba.
Justo al mediodía nos hemos ido a pasear. Ha sido curioso ver a esos niños jugando en el parque, con sus monos de esquiar y correteando como si hiciera un tiempo agradable. Evidentemente los suecos son muy funcionales. ¡Me gustan!
Caminando hemos llegado hasta la ciudad vieja, allí hemos comido en un restaurante cercano al de ayer, por no repetir, económicamente no era tan asequible, pero nos hemos portado muy bien el resto de los días.
Después, como seguíamos sin estar muy despiertos, hemos vuelto al hostal. Antes hemos parado en una tienda para comprar una película. ¡Qué extraño aquí este tipo de cosas están más baratas que en España! Al final hemos comprado "La Zona". Es mejicana, así que, aunque no entendamos los subtítulos, sí entenderemos la lengua que hablan.
La película pensábamos que quizás podríamos verla en la habitación, pero no ha sido el caso. Eso que nos llevamos de recuerdo del viaje, curioso, desde luego.
A las cinco de la tarde estábamos tumbados en la cama, dispuestos a relajarnos y preparados para meternos otro madrugón para el cuerpo.
Disfrutamos de algo de televisión en inglés y a las nueve de la noche caímos como benditos.

07/01/09 Estocolmo-Madrid


Hoy nos ha tocado volver a levantarnos temprano. Bueno, al menos eso he sentido yo, porque las cinco de la mañana me parecen unas horas algo intempestivas. El madrugón se debe a que tenemos que coger el vuelo que llevará de vuelta a Madrid. Sí, aquí acaba nuestra aventura. La verdad es que no estoy motivada por la vuelta a la rutina, pero creo que no hay más opción.
A las 05:40 hemos tomado el metro hasta T-centralem. Posteriormente en la misma estación hemos cogido el tren (el mismo de ayer) que nos llevaba al aeropuerto de Arlanda. A las 06:5 ya habíamos facturado, por lo que hemos tenido tiempo para desayunar tranquilamente.
El vuelo no se ha retrasado en exceso, de hecho han sido muy puntuales. Desde las ocho de la mañana hasta las once menos cuarto hemos estado metidos en ese aparatejo llamado avión.
Luego, no ha habido tiempo de mucho más. El metro y directa a trabajar, ya que a la una menos cuarto tenía mi primer paciente.